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Mostrando entradas de enero, 2014

El Dios de Restauración

Restauración de Noemí El sol candente hería fuertemente sus ojos rojos de llorar, que miraban sin mirar, divagando entre grises callejones, donde un día, hacía mucho tiempo ya de eso, había jugado entre risas y canciones, soñando los sueños de los niños, sueños de alegría y emociones, sueños de grandeza y de riqueza; días aquellos donde se sentía la sublime y gran princesa.   Sueños que un día al despertar se habían esfumado entre empujones, sueños que habían sido devorados por las huestes de la triste realidad que digieren emociones.   Allí en aquel lugar de los recuerdos, donde emprendiendo cierto día emocionada aquel viaje a la ventura, había salido esperanzada a comenzar aquella vida que sus sueños le habían motivado, saliendo con su amado y fiel esposo y sus dos hijos, que se habían convertido en la luz de su existencia. Hoy... aquella tierra que le vio nacer, la volvía a recibir, viéndola venir por las sendas del dolor y la tristeza.    Aquella cuyo nombre era dulzu

un varón de Dios que intercede

Un varón de Dios intercede   Y se levantó de mañana y salió el que servía al varón de Dios,  y he aquí el ejército que tenía sitiada la ciudad,  con gente de a caballo y carros.  Entonces su criado le dijo:  ¡Ah,  señor mío!  ¿qué haremos?  El le dijo:  No tengas miedo,  porque más son los que están con nosotros que los que están con ellos. Y oró Eliseo,  y dijo:  Te ruego,  oh Jehová,  que abras sus ojos para que vea.  Entonces Jehová abrió los ojos del criado,  y miró;  y he aquí que el monte estaba lleno de gente de a caballo,  y de carros de fuego alrededor de Eliseo. 2Reyes 6:15-17 . Un varón de Dios nunca juzga el miedo de los demás, nunca acusa falta de fe, no se enoja cuando otros se asustan, ni mucho menos los acusa de miedosos; un varón de Dios sabe que es difícil dejar de temer cuando lo natural habla más fuerte que lo sobrenatural, comprende y sabe que mientras Dios no abra sus ojos, jamás dejarán de sentirse amedrentados por las cosas de este mundo.  Un varón de

entresacando lo precioso en lo vil

Entresacando lo precioso en lo vil ...y si entresacares lo precioso de lo vil, serás como mi boca. Jeremías 15:19. Un rayo de luz en medio de la densa oscuridad...  una pequeña nube del tamaño de la mano de un hombre en la inmensidad del cielo azul... una gota de agua en el desierto más atroz… tal vez, una ínfima sonrisa en medio de aquel horrible mar de lágrimas o un halo de esperanza en un lamentable universo de tristezas...  pero, siempre habrá algo precioso en medio de lo vil, algo útil en la basura, algo bello en los desaciertos, algo hermoso en el desierto. La clave está en encontrarlo; hacer a un lado lo que no vale, olvidar lo que no edifica, aprender de lo que enseña, pensar en lo que es verdadero cuando todo parece falso, lo honesto cuando todo parece hipocresía, lo justo cuando todo parece injusto, lo puro en lo impuro, encontrar el buen nombre, la virtud y la alabanza (Filipenses 4:8) donde parece que todo está perdido, recordando que a los que a Dios aman “t